Día Internacional de la Enfermería. Enfermería: Una voz para liderar
Día Internacional de la Enfermería. Enfermería: Una voz para liderar
La observación indica cómo está el paciente, la reflexión indica qué hay que hacer, la destreza práctica indica cómo hay que hacerlo. La formación y la experiencia son necesarias para saber cómo observar y qué observar; cómo pensar y qué pensar.
Florence Nightingale, Notas sobre hospitales, 1863
En la celebración de esta efeméride anualmente se selecciona un tema central. Para el año 2022 el lema es "Enfermería: Una voz para liderar – Invertir en enfermería y respetar los derechos para garantizar la salud global".
El 12 de mayo se celebra el Día Internacional de la Enfermería, con el objetivo de brindar un merecido homenaje a todos los enfermeros y enfermeras, que a nivel mundial realizan esta labor para toda la humanidad, así como rendir tributo a Florence Nightingale, que nació un 12 de mayo y es considerada la fundadora de la enfermería moderna.
Nació en Florencia, en aquel momento capital del Gran Ducado de Toscana. A partir de 1844 logró formarse como enfermera. En aquella época, la profesión de enfermera –o cuidadora– estaba asociada a mujeres de la clase trabajadora, nada que ver con una joven culta como Florence, que además estaba destinada a casarse.
Durante los siguientes años, segura de su vocación y de manera autodidacta, se convirtió en una experta frecuentando los centros sanitarios que visitaba en cada uno de sus viajes. Florence fue una gran viajera, una costumbre de la época cuya función era instruir a las mujeres del siglo XIX: Francia, Italia, Suiza, Grecia o Egipto fueron algunos de sus destinos. Los escritos en su diario de viaje muestran su proceso de aprendizaje, sus habilidades literarias y su manera de afrontar vida.
Florence Nigthingale no fue solo esa ‘dama de la lámpara’ como la apodaron en relacion al poema "Santa Filomena" , de que observaba y aliviaba a sus pacientes durante las largas noches de Scutari. Su valioso legado, fundamentalmente en enfermería y estadística, merece todo nuestro reconocimiento a ella y a todas las "damas de la lámpara" que siguen su ejemplo y juramento.
«Abstenerse de provocar daño alguno» y a «considerar como confidencial toda información que le sea revelada en el ejercicio la profesión, así como todos los asuntos privados de los pacientes»